Nuestro viaje estaba programado para el 16 de enero pero debido a la meteorología, nuestro vuelo fue cancelado y finalmente tuvimos que volar el 17 de enero a las 13:30 horas.
En un primer momento pensamos que habíamos perdido el dinero de la visita al Castillo de Edimburgo ya que compramos los tickets por anticipado para el tramo de 12:00 a 13:30 horas del día 17 de enero. ¡¡Gracias a Dios que no nos pusieron ningún inconveniente para acceder al día siguiente!!
¿Cómo desplazarse del aeropuerto al centro de Edimburgo?
Ir del aeropuerto al centro y viceversa es bien sencillo. Nada más salir del aeropuerto tienes la línea de bus Airlink Express con frecuencias entre 8/10 minutos o 15 minutos dependiendo de la franja horaria. El precio de ida y vuelta es de 7,5£.
¿Dónde nos alojamos?
Nuestro billetes de avión los compramos en agosto y casi seguido empezamos a mirar hoteles. Encontramos una muy buena oferta desde Booking.com para alojarnos en Cityroomz Edinburgh. 3 noches para 2 personas por 139€.
Como puntos positivos del hotel destaco la cercanía para la conexión al aeropuerto (frente a la puerta se encuentra la parada de autobús), el silencio y la opción del desayuno buffet (6,95£ reservando a la llegada o por adelantado, sino el precio es de 8,95£).
Como puntos a mejorar, sin embargo, tal vez la variedad de comida del desayuno buffet no era muy amplia en comparación con otros hoteles en los que me he alojado pero sí que tenía lo básico: zumos, cafés, tés, leches, fruta, queso, embutidos, pan, mermeladas, nutella, muffins, cereales y yogures. Otro aspecto no tan excepcional podría ser la ubicación. En sí el hotel es céntrico pero puede resultar alejado de los puntos de interés (se encuentra al comienzo de Princes Street).
Planificación del día 1
Después de dejar las cosas en el hotel, nos dirigimos a los jardines Princes Street Gardens y su majestuosa fuente Ross Fountain.
Eran las 17:00h. y aún no habíamos comido. Aprovechamos la ocasión para probar el típico bocadillo de cerdo asado en el restaurante Oink. ¡Por suerte pudimos degustar el último bocadillo que iban a servir en el día! Y es que según nos comentaron, al día únicamente asan un cerdo y lo sirven hasta que se agote.
Tengo que admitir que está realmente rico.
Después continuamos nuestra ruta para degustar unas galletas en Ben´s Cookies.
Después continuamos nuestra ruta para degustar unas galletas en Ben´s Cookies.
Una vez saciado nuestro estómago, fuimos andando tranquilamente hasta Royal Mile ya que teníamos la visita guiada en español a las 18:15h. en The Real Mary King´s Close.
¿Qué es Real Mary King´s Close? ¿Merece la pena?
Mary King´s Close es uno los callejones situados bajo los edificios del Old town en la Royal Mile, y donde hace tiempo los habitantes de Edimburgo vivieron.
La guía nos contó que las familias más pobres llegaron incluso a vivir con otras 2 familias más, conviviendo con un total de 15 personas en un espacio minúsculo.
Las condiciones sanitarias eran escasas: sin apenas ventilación natural ya que había que pagar impuestos por tener ventanas, haciendo sus necesidades en un barreño que solo podían vaciarlo a las noches, duchandose 2 veces al año… Y así llegó la peste negra y la peste bubónica.
Durante el tour se visita una estancia donde se albergaba el ganado y un cuarto con una historia muy peculiar de la médium japonesa Aiko Gibo.
No te quiero revelar ningún detalle más. De lo contrario, la visita guiada no tendría ningún sentido.
Después de comprar algunos souvenirs en la Royal Mile (en esta calle las tiendas cierran un poco más tarde), cenamos en un restaurante llamado Wings. Como su nombre indica, casi toda la carta se compone de alitas de pollo o nuggets.
Para terminar nuestra velada, acudimos a tomar un Kalimotxo (7,15£) al pub The Last Drop. En el siglo XVII en la plaza Grassmarket se celebraban las ejecuciones de brujerías, robos…. Para muchos de los prisioneros como última voluntad antes de ser ahorcados se les concedía el deseo de tomarse un whisky en esta taberna.