Menorca. Qué ver en 3 días (Itinerario del viaje)

por Jessica
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Mirando y mirando vuelos, encontramos por 100€ un vuelo con la compañía Volotea de Bilbao a Menorca para el puente de octubre del Pilar. Evidentemente no era una ganga, pero estábamos seguras cuando compramos el vuelo que necesitaríamos desconectar.

Atardecer desde la Cova d’en Xoroi en Menorca

A última hora nos cambiaron el horario de ida, y en vez de madrugar para aprovechar el día, nos fastidiaron al salir el vuelo al mediodía. Para las 16:30h. ya estábamos en Menorca, listas para coger nuestro coche de alquiler. Para el alquiler del automóvil, comparamos los precios, las coberturas y las opiniones de los usuarios a través del portal Rentalcars, pero la reserva la hicimos directamente con la compañía que seleccionamos: Autos Menorca (precio 97€ sin franquicia, dos conductores y seguro a todo riesgo). El procedimiento tanto para la recogida como para dejarlo es sencillo: en el parking tienen «un mostrador» (el maletero de dos coches hacía de mostrador) donde te piden los DNIs y te hacen firmar unos documentos. Para la vuelta, basta con dejar el coche con las llaves dentro y el ticket del parking.

Como nuestra intención era aprovechar los días lo máximo posible, nos acercamos hasta Minibeca Bell; un poblado pequeño con casitas blancas y estrechas callejuelas. En numerosos puntos nos encontramos con carteles de “silencio, por favor» ya que se trata de una urbanización privada, aunque no nos lo parezca. Nos encantó las aguas cristalinas de la Cala d’en Fust con sus barcos de pescadores.

De ahí, nos dirigimos hasta Mahón la capital de Menorca. Recorrimos el centro histórico e hicimos algunas compras de souvenirs como quesos y botellas de vinos. Para que no se nos hiciera tarde ya que no habíamos hecho el check in, nos dirigimos hasta la zona de Cala Galdana. El apartamento donde nos alojamos tiene el mismo nombre de la zona: Apartamentos Alta Galdana. Pagamos 130€ por un apartamento para 4 personas (aunque éramos dos) con los impuestos turísticos incluidos. Ahí cenamos en la Cafetería Alaska una ración de pulpo, sepia a la menorquina y quesos de Mahón.

El domingo madrugamos para aprovechar el día. Primeramente, fuimos hasta la Playa Turqueta y disfrutamos de sus impresionantes aguas cristalinas y la tranquilidad. A las 11:45h. teníamos reservado un brunch en el Hotel boutique Jardí de Ses Bruixes en Mahón (podéis leer el post aquí). Después de recargar las pilas con el fantástico brunch, nos dirigimos hasta la Cala Macarella y Macarelleta (se accede una a otra por un camino de piedras. El camino incluso sigue hasta la Playa Turqueta). Estas dos calas nos parecieron más comerciales, con su chiringuito bien montado. Sobre las 18:00h. nos dirigimos hasta la Cobá di xoroi. ¡Madre mía! ¡Menuda cola había! Nos armamos de paciencia y positividad, pero hay un límite de aforo y no pudimos entrar. Por lo tanto, decidimos dejarlo para el día siguiente, y la tarde-noche aprovecharla para ir a Fornells. Previo al viaje, tenía leído que en esta zona es típica la caldereta de langosta, pero no tenía ningún sitio mirado. Móvil en mano, busqué rápidamente un sitio y ¡Menudo acierto! La mejor langosta que he probado en mi vida está en Es Cranc. A mi amiga Virginia con la que fui le llevo diciendo que tengo que volver a Menorca sólo para comer de nuevo la langosta. Y no, no pedimos la caldereta de langosta, sino el plato que nos recomendó el camarero: langosta con su propio jugo y vino blanco, acompañado por patatas y huevo frito con ajo. ¡Solo con escribir estas líneas estoy de nuevo salivando!

El lunes comenzamos el día visitando Ciudadela. Primeramente, desayunamos en el Imperi unos bocadillos de sobrasada y embutido menorquín. ¡Espectacular también! Más tarde nos dirigimos hasta el Puente de Gil; un puente «colgante» en medio del mar. De ahí nos dirigimos hasta la Playa Pregonda, después de caminar un buen rato ya que el parking principal estaba cerrado. Hoy sí o sí teníamos que entrar en la Coba di Xoroi, por lo que nos plantamos allí sobre las 16:30h., y ¡por fin, pudimos entrar! ¿Realmente vale la pena pagar 20€ con copa incluida para ver el atardecer? Si es tu primera vez sí.

El martes no teníamos mucho tiempo ya que nuestro vuelo salía a la 13:00h. Por lo tanto, solo tuvimos tiempo de desayunar en Pipet & Co en Mahón unas tostas de aguacate y jamón, croissant, zumo natural de naranja, limonada pink, y dos cafés. ¡Este sitio también nos gustó mucho, aunque nos quedamos con el Imperi y el brunch!

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